![]() |
Foto: Pedro Ignacio Fernández. |
Despertándote
a la vida
sentía
que la mía
comenzaba
a ser vivida.
Ya
te amaba
y
aún no te sentía.
Ya
te hablaba
sin
saber si me escuchabas.
Ya
te oía
pronunciando
esa palabra
que
durante muchos años
pensé
que nunca escucharía.
Y
entre juegos y risas
vas
creciendo muy deprisa,
convirtiendo
tu mirada
en
adolescencia complicada,
con
dudas y preguntas estudiadas.
Y
pronto llegará ese día
que
tendré que entregarte,
que
tendrás que adentrarte
en
tu propia vida.
No
me olvides y no te olvides
que
empecé a sentir vida
el
día que convertiste mi sueño
en
mi GRAN alegría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario