jueves, 6 de febrero de 2014

TU LEGADO

Tu legado me ha llegado
de otros labios, de otras manos
aunque lo que hubiera deseado
es volver a olerte, a verte
y conseguir reconocerte.

Sentir tu vigor y tu fuerza
y no esta terrible ausencia
que tu vacío me causa, me deja,
marchitando un infante corazón
inocente, abatido y lastimado
carente, desolado y desarmado.

Respiro hondo y profundo
para poder seguir escribiendo
estos versos, estas frases
estas letras y compases.

Y me enfado y me emociono
con el mundo y todo el planetario
porque ni entiendo ni comprendo
por qué te fuiste tan temprano.

Cierro los ojos y me acomodo en el ayer
pero tus recuerdos, apenas puedo ver
tan sólo borrones en blanco y negro
y diminutas luciérnagas consumidas
que acabarían iluminando mi vida.


Fotografía: Pedro I. Fernández

2 comentarios:

  1. ¿Dónde tenías todos estas vivencias? Has abierto una gran puerta dentro de ti, que nos invita a pasar... Un beso y continúa así.

    ResponderEliminar